Nota de Aporrea: La presencia de francotiradores operando desde edificios residenciales, convierte a las familias inocentes, niños y ancianos que allí habitan en escudos humanos, práctica despreciable que es considerada un crimen de guerra de acuerdo al derecho internacional.
Credito: Aporrea.org
Así justificó Thabata Molina de El Universal los asesinatos
Credito: El Universal
Pero un lapsus de Edgar López de El Nazional revela el origen del conflicto de Los Cortijos
Caracas, 6 de marzo de 2014.- Los pasquines de extrema derecha El Universal y El Nazional, convertidos en voceros de los sectores violentos que ejecutan las guarimbas y las guayas de la muerte, justificaron hoy en sus ediciones digitales los asesinatos a sangre fría, cometidos por francotiradores opositores, en contra de un efectivo de la GNB y un ciudadano chavista en el sector Los Ruices de la capital venezolana.
Los mencionados pasquines deslindan de responsabilidad a los francotiradores, acusando al sector oficialista de la violencia "enfrentamiento entre un grupo de motorizados armados y los vecinos (...) En el hecho resultaron heridos un funcionario de la GNB... un mototaxista también resultó herido" dice el Universal, en tanto que el Nazional siguiendo la misma línea reporta "Los motorizados identificados con el oficialismo intentaron derribar las barricadas de los manifestantes, lo que causó un enfrentamiento con los vecinos en el que resultó herido un motorizado."
Sin embargo mas adelante El Nazional se contradice cuando admite que "Los ataques de motorizados identificados con el oficialismo a vecinos de Los Cortijos (...) comenzaron luego de que un motorizado resultara herido en la clavícula." Este lapsus de Edgar López, quien firma la nota, indicaría que fueron precisamente los opositores los que iniciaron la violencia, lo que no menciona la nota es que ese herido recibió un tiro en la cabeza por intentar retirar basura de la vía pública para poder pasar; y su muerte enardeció al resto de motorizados que trabajan en el sector y que se han visto afectados por las acciones violentas opositoras, incluso perdiendo la vida degollados con las "guayas de la muerte".
De igual manera el efectivo de la GNB falleció consecuencia de un disparo en la cabeza, hecho que no es mencionado específicamente en ninguno de los dos medios, sugiriendo de manera directa que su muerte se debe a lo que ellos llaman "colectivos armados" denominación que ahora usan para cualquier ciudadano que proteste por las guarimbas.
Ambos medios no ocultan su apoyo a las acciones violentas cuando se refieren a los opositores armados como inocentes "vecinos" y a los chavistas como "colectivos armados" o "motorizados armados" sin aclarar porqué entonces, si los oficialistas están armados y han disparado a diestra y siniestra, los heridos y las víctimas fatales estuvieron precisamente del lado de los oficialistas y de la GNB.
También en los artículos justifican los asesinatos cuando falsean los hechos, haciendo ver a las fuerzas de seguridad como invasoras que están entrando por la fuerza a los edificios, sin hacer mención que desde esos mismos edificios se lanzan objetos contundentes y se hacen disparos.
Precisamente la presencia de francotiradores operando desde edificios residenciales, convierte a las familias inocentes, niños y ancianos que allí habitan en escudos humanos, práctica despreciable que es considerada un crimen de guerra de acuerdo al derecho internacional, lo que justifica plenamente en cualquier país del mundo la entrada de fuerzas de seguridad para neutralizar a los francotiradores.
Los mencionados pasquines deslindan de responsabilidad a los francotiradores, acusando al sector oficialista de la violencia "enfrentamiento entre un grupo de motorizados armados y los vecinos (...) En el hecho resultaron heridos un funcionario de la GNB... un mototaxista también resultó herido" dice el Universal, en tanto que el Nazional siguiendo la misma línea reporta "Los motorizados identificados con el oficialismo intentaron derribar las barricadas de los manifestantes, lo que causó un enfrentamiento con los vecinos en el que resultó herido un motorizado."
Sin embargo mas adelante El Nazional se contradice cuando admite que "Los ataques de motorizados identificados con el oficialismo a vecinos de Los Cortijos (...) comenzaron luego de que un motorizado resultara herido en la clavícula." Este lapsus de Edgar López, quien firma la nota, indicaría que fueron precisamente los opositores los que iniciaron la violencia, lo que no menciona la nota es que ese herido recibió un tiro en la cabeza por intentar retirar basura de la vía pública para poder pasar; y su muerte enardeció al resto de motorizados que trabajan en el sector y que se han visto afectados por las acciones violentas opositoras, incluso perdiendo la vida degollados con las "guayas de la muerte".
De igual manera el efectivo de la GNB falleció consecuencia de un disparo en la cabeza, hecho que no es mencionado específicamente en ninguno de los dos medios, sugiriendo de manera directa que su muerte se debe a lo que ellos llaman "colectivos armados" denominación que ahora usan para cualquier ciudadano que proteste por las guarimbas.
Ambos medios no ocultan su apoyo a las acciones violentas cuando se refieren a los opositores armados como inocentes "vecinos" y a los chavistas como "colectivos armados" o "motorizados armados" sin aclarar porqué entonces, si los oficialistas están armados y han disparado a diestra y siniestra, los heridos y las víctimas fatales estuvieron precisamente del lado de los oficialistas y de la GNB.
También en los artículos justifican los asesinatos cuando falsean los hechos, haciendo ver a las fuerzas de seguridad como invasoras que están entrando por la fuerza a los edificios, sin hacer mención que desde esos mismos edificios se lanzan objetos contundentes y se hacen disparos.
Precisamente la presencia de francotiradores operando desde edificios residenciales, convierte a las familias inocentes, niños y ancianos que allí habitan en escudos humanos, práctica despreciable que es considerada un crimen de guerra de acuerdo al derecho internacional, lo que justifica plenamente en cualquier país del mundo la entrada de fuerzas de seguridad para neutralizar a los francotiradores.
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