31 de julio de 2011.- Gracias a la resuelta y consciente decisión de los y las campesinas del Valle del Momboy, y la eficaz intervención tanto del vicepresidente de la República y el Ministro de Agricultura y Tierras en dar apoyo firme a la lucha campesina, se logró la liberación de los productores de la finca San Benito ubicada en Mendoza Fría en el estado Trujillo quienes fueron ilegalmente detenidos por una comisión de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), dentro del predio (en completa producción) el día de ayer. Estos productores quienes tienen entre 6 y 12 años bajo la figura de medianería y tercerización, fueron desalojados como invasores por denuncia del terrateniente Pedro Villegas.
Tras la efectiva movilización de los colectivos campesinos de Jeromito, San Pablo y Mendoza Fría se logró que el Instituto Nacional de Tierras dictaminara medida cautelar no solo para la Finca San Benito, sino que además se consiguió resueltamente la medida a la Finca El Olimpo garantizando la permanencia de los camaradas de vuelta en sus cultivos. Queda demostrada así la certeza de estos colectivos en trabajar con un objetivo en común, la guerra contra el latifundio, significando en este sentido una victoria contra el burocratismo regional.
En este sentido se hace pertinente la crítica pública, en cuanto que a pesar de ser liberados los campesinos, queda demostrado la falta de compromiso de quienes tienen la responsabilidad de conducir políticas revolucionarias en materia agraria en Trujillo, personajes con intenciones de fragmentar las iniciativas de organización y articulación de la lucha campesina, y quienes centran la revolución en el hecho de adueñarse del poder para beneficio propio, manifestaron miembros del movimiento campesino.
El pueblo observa con ojos propios, desde una mirada crítica, que detrás del discurso revolucionario hay evidencias de malas prácticas. Los mismos quienes motivaron los cambios en la coordinación del inti-trujillo, simplemente por temor al conocimiento de los actos irregulares que desde allí se ejecutan, finalizaron diciendo.
Tras la efectiva movilización de los colectivos campesinos de Jeromito, San Pablo y Mendoza Fría se logró que el Instituto Nacional de Tierras dictaminara medida cautelar no solo para la Finca San Benito, sino que además se consiguió resueltamente la medida a la Finca El Olimpo garantizando la permanencia de los camaradas de vuelta en sus cultivos. Queda demostrada así la certeza de estos colectivos en trabajar con un objetivo en común, la guerra contra el latifundio, significando en este sentido una victoria contra el burocratismo regional.
En este sentido se hace pertinente la crítica pública, en cuanto que a pesar de ser liberados los campesinos, queda demostrado la falta de compromiso de quienes tienen la responsabilidad de conducir políticas revolucionarias en materia agraria en Trujillo, personajes con intenciones de fragmentar las iniciativas de organización y articulación de la lucha campesina, y quienes centran la revolución en el hecho de adueñarse del poder para beneficio propio, manifestaron miembros del movimiento campesino.
El pueblo observa con ojos propios, desde una mirada crítica, que detrás del discurso revolucionario hay evidencias de malas prácticas. Los mismos quienes motivaron los cambios en la coordinación del inti-trujillo, simplemente por temor al conocimiento de los actos irregulares que desde allí se ejecutan, finalizaron diciendo.
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